10.14.2013

¿Cuándo me convertí en esto?

Cuándo no hice un luto o un velatorio como lo merecía? Cuándo me encerré en una máquina y no le dije nada al respecto a nadie? Cuándo me dejo de importar? Cuándo me convertí en una máquina del sistema que estudia porque es lo que tiene que hacer? Ahora, ni bien termine esta nota cerraré la computadora y me pondré a pensar y recordar. Planearé mi mañana, meditaré mi futuro, sonreiré a los recuerdos, lloraré con los mismos. Porque no soy así, no sé qué me hizo actuar así hoy, tal vez el hecho de que haya otras personas además de yo con las que no tengo confianza o caradurez de irme a mi pieza a llorar y esperar que me dejen tranquila. 
En fin. 
No estoy segura de alguna vez decirle cuanto lo quiero. Nunca le dije que lo iba a extrañar, no lo veía desde quién recuerda cuando. Pero lo abracé con el alma alguna vez, espero que lo haya sentido, porque ese abrazo hoy no se olvidó ni un momento en mi mente. 
Concluyendo, mando un abrazo al cielo y muchas oraciones.